POR LUIS URIBE - Especial
Asombra verlo jugar al futbol a Derek Frank. Tiene tan solo 9 años y gestos de grande. Para la pelota, gambetea para adelante, frena, toca, patea al arco. Talento innato. Sus movimientos recuerdan a … Messi cuando era chiquito. ¡Si, Messi!.
Pero su habilidad ya ha trascendido las fronteras locales, al punto que fue requerido en 2018 para reforzar a un equipo de Sierra Colorada que participó en el Mundialito de General Roca.
Ahí empieza otra parte de la ya asombrosa historia de este pequeño futbolista. Jugó en ese certamen con chicos de 12 años, y él con sus 8 añitos “la rompió”.
Al lado de sus rivales parecía el hermanito menor. Algunos eran el doble de su altura, como lo muestran las fotos, entre gigantes con la pelota al pie. Volvió a casa y siguió con su vida de niño. Jugando siempre a la pelota y asistiendo a la escuela 146, donde va a 4° grado.
El miércoles sonó el teléfono de Sergio, su papá, empleado municipal. Era un 011. Del otro lado una voz le dijo que era del club Lanús, y que estaban interesados en que Derek viaje para hacer una prueba. Lo habían visto jugar en el Luis Maiolino y quedaron encantados con su habilidad.
El nene "se quiere ir ya", contó el papá. Tienen 30 días para presentarse. Sólo deben resolver los gastos de los pasajes, porque la institución granate no se hace cargo de esos gastos aunque le garantizan la estadía.
Hay varios chicos que fueron tentados por clubes de Buenos Aires para probar suerte. Pero nunca tentaron a uno de tan corta edad. Hubo casos aislados en otras partes del país. Como el rosarino, el mejor del mundo.
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